Corriente Federal de Trabajadores
Hector Amichetti, secretario general de la Federación Gráfica Bonaerense, fue entrevistado en Radio del Plata por Daniel Tognetti. Allí se refirió a la convocatoria para el próximo 29 de abril donde se conmemorará el Día del Trabajador sin dejar de lado la actualidad compleja que atraviesa el sector gráfico.
La marcha del viernes tendrá la participación conjunta de las cinco centrales sindicales en un claro mensaje político. Amichetti se refirió a que el eje de la convocatoria es “haber instalado la cuestión del empleo que es un tema central en este momento para las organizaciones sindicales. La marcha es fundamental porque hay que expresar en las calles, con una posición muy contundente, que nuestra principal preocupación pasa hoy por la defensa del empleo”. Luego amplió: “Todos los gremios están absolutamente convencidos de que hay que expresar esta cuestión. Va a tener un fuerte contenido la marcha en ese aspecto”. El miércoles habrá una reunión con los principales referentes de las centrales donde se definirá si habrá un paro para reforzar al reclamo.
Acerca de la situación del sector gráfico trazó un panorama preocupante a partir de las medidas tomadas por el gobierno de Mauricio Macri: “tras lo que fue la devaluación se generó una retracción en todos los niveles de producción. Hoy estamos atravesando un período donde hay mucho menos trabajo en los talleres”.
Otro tema que afecta a los gremios industriales y la Federación Gráfica concretamente tiene que ver con la apertura de importaciones. Allí Amichetti explicó: “En el caso de la industria gráfica a los veinte días de asumir este gobierno sacó todas las barreras para la importación de libros. Por ejemplo, la Cámara del Libro ya admite que hay un incremento de las importaciones del 40 % en un claro perjuicio para las fuentes laborales locales”.
Amichetti destacó la evolución del sector en la última década y la importancia de las políticas de protección y desarrollo de la producción nacional: “En la industria gráfica del libro pasamos, a partir de las medidas de protección a la industria nacional, de imprimir 30 millones de libros a más de 100 millones en el 2014”. Explicó el peligro de una apertura de la economía a partir de la experiencia que tuvo en la industria gráfica: “En los noventa las editoriales mandaban a imprimir los libros escolares a China. Ahí hay un gran negocio de las grandes editoriales que imprimen más barato afuera y venderlos al precio de mercado local. Esto puede tener un efecto inmediato pero puede ser gradual. Por eso hemos impulsado una campaña en defensa de la producción y el trabajo gráfico argentino”.
Un punto extra que afecta al sector tiene que ver con la política de distribución de libros que llevaba adelante el anterior Gobierno nacional. Dicha política, en estos primeros meses de gestión macrista se han interrumpido. Amichetti explicó: “el Estado ya no tiene la política de distribución de libros para las escuelas más humildes. Se repartieron 75 millones de ejemplares distribuidos en los últimos cinco años”.
Sobre el final de la entrevista surgió el nombre de Raimundo Ongaro, de su compromiso con la lucha de los trabajadores y sobre el rol histórico que ha tenido la Federación Gráfica Bonaerense en reivindicaciones que exceden el mero reclamo gremial y se relaciona con los destinos del país: “Nuestro sindicato siempre se ha pensado junto a un proyecto de Nación, no hemos tenido una actitud corporativa o sectorial. Existe justicia social en cuanto haya un proyecto nacional que contemple el interés de la mayoría”. Allí hizo una mención al trabajo que se está haciendo desde la Corriente Político Sindical Federal: “Trabajamos en esa línea con otras organizaciones sindicales, que no están en la primera línea de protagonismo público pero que hoy estamos uniéndonos con las organizaciones sindicales del interior del país. Entendemos que tenemos que hacer pesar esta condición de los trabajadores”.
LEONARDO MARTIN (leomartinprensa@gmail.com)
