Corriente Federal de Trabajadores
La semana política estuvo signada primero por dilucidar el rumbo que iba a tomar la CGT frente a las propuestas gubernamentales y posteriormente ante el debate sobre el rumbo que tomó la conducción de la CGT. Qué expresaron algunos de los referentes de la Corriente Federal de Trabajadores.
Por LEONARDO MARTÍN
La discusión central política de la semana tuvo a la CGT como eje de los debates. Cuando parecía todo dado para convocar a un paro de 24 horas, con un Confederal reciente en que decenas de gremios habían otorgado esa potestad a la conducción, primó la opción dialoguista y la aceptación de la propuesta gubernamental. Un bono de mil pesos para beneficiarios de planes sociales, jubilados y pensionados que cobran la mínima y la exención del pago de Impuesto al Salario en sueldos hasta 55 mil pesos brutos fue la oferta concreta gubernamental. Además abrió un espacio de negociación por decreto en una mesa tripartita con empresarios, sindicatos y gobierno que tendrá su primer encuentro el próximo miércoles.
Arreciaron las críticas sobre la decisión de la CGT por un negociación que lejos está de colmar las expectativas de los trabajadores y de debatir temas claves como son la conservación de los empleos, la protección de la industria nacional y la reconstitución del poder adquisitivo en un año en que el deterioro es inocultable. Tampoco fue atendida la demanda ni cumplida la promesa de campaña de derogar el Impuesto al Salario.
La Corriente Federal de Trabajadores fue la vertiente sindical que integra la CGT más elocuente en el pedido de un paro nacional en el contexto de un plan de acción. Lo sostuvo en los Confederales que se han llevado adelante en este 2016 así como también lo ha hecho en el último Congreso Extraordinario. Inclusive el martes emitió un comunicado reafirmando esa posición al que tituló “Para los Trabajadores la única verdad es la realidad”.
El comunicado hizo un diagnóstico crudo y explicitó una posición: “despidos, alza de precios descontrolada, tarifazos, pérdida del poder adquisitivo del salario, caída del consumo, mercado interno en recesión, caída de la producción. Por ello se impone el cambio de la Política Económica. En caso de no obtener satisfacción a estos puntos, reivindicados en la multitudinaria movilización del 29 de abril, volvemos a sostener que la Confederación General del Trabajo, debe convocar a un PARO GENERAL DE ACTIVIDADES y definir un plan de Acción dándole continuidad hasta lograr la satisfacción de los reclamos de los trabajadores argentinos”.
Carlos Minucci, secretario general de APSEE, en declaraciones radiales posteriores al anuncio de la conducción de la CGT lanzó dardos filosos: “El Triunvirato no es dueño de la CGT, solo le dieron un mandato. No cumplieron con lo planteado por el Confederal. Los puntos fueron la inmediata suspensión de los despidos, la reapertura de paritarias y bono por la elevación del costo de vida, la eliminación del Impuesto a la Ganancias y terminar con las importaciones en defensa del empleo. Caso contrario se acordó ir a paro general. De eso no se hizo nada. Se firmó una acta que nos está llevando a un terreno conflictivo”.
Héctor Amichetti, secretario general de la Federación Gráfica Bonaerense, también mostró su insatisfacción con el camino tomado: “los temas que de por sí se llevaron para dialogar con el Gobierno eran muy acotados. Para los gremios que integramos la Corriente la expectativa era poner sobre la mesa cuestiones centrales como el trabajo,los despidos, la importación y la reapertura de las negociaciones paritarias. Si aceptamos la perdida de poder adquisitivo empeoramos la recesión. Eso no se resuelve con un bono. El bono es un paliativo menor”.
Fabián Felman, de la CEA, fue otro de los que se mostró decepcionado: “los trabajadores no nos llamamos un bono de fin de año. Lo que queremos es la reapertura de las paritarias para recuperar el salario, para que se cumpla la promesa electoral de que el Impuesto a las Ganancias no iba a cobrarse a los trabajadores, para generar trabajo. Hace falta una discusión en serio de todas estas cuestiones y eso solo puede darse con un cambio en la política económica”.
Fiel a su estilo, sin vueltas, Walter Correa fue directo en las críticas: “No comparto nada lo que hace este triunvirato. Como Corriente siempre planteamos plan de lucha con movilización. En el Confederal no se habló de bono. Acá hay una burocracia que no representa a ese plan de lucha inorgánico que llevan las bases que están resistiendo y peleando. Nosotros tenemos que impulsar eso para que se de el gran paro nacional y plan de lucha para enfrentar a la oligarquia que propicia el ajuste”.
Victor Carricarte, del sindicato de empleados de farmacia, “No se discutió la apertura indiscriminada de las importaciones, la reapertura de paritatias y un tratamiento especial para evitar los despidos. Cuestiones urgentes que van más allá de un bono”.
Pablo Biró, secretario general del gremios de los Pilotos de Líneas Aéreas, también se refirió al tema: “Para alguien que reciba un plan social o una jubilación quizás impacten mil pesos pero para nosotros eso no es dignificar al trabajador. Necesitamos recomponer el poder adquisitivo del pueblo”.
El último Confederal fue claro al otorgar la capacidad a la conducción la potestad de llamar a un paro. Dejó a su criterio el día y la modalidad.
La opinión de Fabian Felman al respecto: “de los resultados de estas reuniones vemos que no hay decisión de cambiar el rumbo. Ante eso creemos que tiene que haber un paro general, no sectorial, acompañado de todos los sectores sociales, para decirle no al ajuste y no a la sordera de quienes no escuchan el pedido del Congreso Confederal de la CGT del 23 de septiembre, donde todos los delegados pidieron reapertura de paritarias o paro. Un bono a fin de año no reestructura el salario”.
Por su lado Minucci también se refirió a ese mandato: “El 99% del Confederal le planteó al Consejo Directo que de no haber acuerdo en los puntos mencionados se iba a ir a un paro general. Ante lo sucedido el jueves 13 de octubre, se está llevando a una anarquización de las bases y no encontramos quién pueda canalizar este conflicto. Este triunvirato va aceptar la flexibilidad de trabajo. Porque si acepta esto, va a ir a aceptar la flexibilidad laboral”.
Héctor Amichetti dio su postura, como representante de un gremio industrial: “La CGT se equivoca porque toma realidades de algunos gremios, no es solidaria con los gremios que hoy están sufriendo como es el caso de los industriales. Debe defender a los más golpeados”.
CÓMO SEGUIR
Un tema que se plantea es ¿cómo continuar cuando los hechos están tan lejos de las expectativas y las necesidades? La Corriente más allá del disconformismo con decisiones ha hecho una opción clara por seguir perteneciendo a la CGT y desde adentro, con una central fuerte y unida, trabajar para que tome un rol activo en la defensa cabal de los intereses de los trabajadores.
“Vamos a seguir coordinando con todos los sectores que están en la lucha. Si no es un paro general con acciones que nos coordinen a todos” dijo Héctor Amichetti.
Victor Carricarte explicó su visión: “El Gobierno lleva adelante un modelo que está hambreando al pueblo, está dejando un ejercito de desocupados y atacando al poder adquisitivo. La situación inexorablemente va a llevar a un plan de lucha encabezado por la CGT porque los trabajadores siguen sufriendo las consecuencias de este modelo”.
Felman describió que enfrentar a las políticas del macrismo va “a requerir mucha organización. Tenemos que resistir estas políticas que van contra los más necesitados. El gobierno no está pensando en las mayorías sino en un gobierno para pocos. Los sindicatos tenemos que exponer esto y juntarnos con el resto de la sociedad, para entre todos definir un plan de lucha. Como organización sindical hemos resuelto pedir a la CGT la ejecución del paro pedido el 23 de septiembre”.
Para cerrar Pablo Biró aseveró: “Desde la Corriente pedimos el paro porque hay problemas en las bases. Ojalá que el movimiento obrero encuentre organicidad para utilizar todo el poder de fuego que tiene”.
Textuales tomados de los programas de radio de Sindical Federal, Punto de Partida, La Señal y Abramos la Boca. Todos de Radio Gráfica 89.3
