Corriente Federal de Trabajadores
Este jueves 28 de septiembre, la Policía de la Provincia de Jujuy reprimió y desalojó una manifestación llevada adelante por trabajadores Sindicato de Obreros y Empleados del Azúcar del Ingenio Ledesma (SOEAIL), quienes están de huelga hace más de 15 días en reclamo de mejoras salariales.
Rafael Vargas, secretario general del SOEAIL, dialogó con el program Panorama Federal en Radio Gráfica donde expresó “hemos intentado hablar con el Ministerio de Trabajo para poder generar un diálogo con la empresa Ledesma” y agregó que “nosotros en las asambleas debatimos propuestas para destrabar el conflicto pero, de una forma caprichosa, nos vienen diciendo que no se puede negociar con medidas de fuerza”.
Según el dirigente sindical. “fue más fácil dar la orden de desalojar que se arme la mesa de diálogo con la empresa”.
En la comunicación explicó que “hay varios heridos por balas de gomas” pero “no hubo detenidos”. En esa línea reflejó que en el operativo “hubo policías vestidos de civiles”.
“Fue una feroz batalla pero no pudieron doblegar la fuerza de los trabajadores porque desde anoche seguimos teniendo la ruta tomada con asambleas permanentes y la lucha sigue. Hay gendarmería apostada en los alrededores de la empresa Ledesma”, añadió.
Por otro lado, Vargas repudió la respuesta del Gobierno y consideró que “el poder que tiene Ledesma puede mucho más que la vocación de diálogo para llegar a un acuerdo”. “Ledesma es una de las empresas agroindustriales más importantes del país y sin embargo es la que nos paga salarios muy bajos”.
Recordando la represión y desalojo de la toma de tierras realizada en 2011, el titular del SOEAIL rememoró que “en ese momento la gente necesitaba donde vivir pero como ya sabemos todo pertenece a Ledesma. La empresa le negó la tierra a los campesinos y ellos tomaron las tierras. Como respuesta, hubo una gran represión que dejó 4 muertos”.
“Ledesma prefiere ver sangre y víctimas en vez de solucionar el problema”, concluyó Vargas.
EL RECLAMO
Los representantes del gremio y los afiliados reclaman que la empresa de la familia Blaquier equipare el salario de 21.900 pesos acordado en el ingenio salteño San Isidro. Ledesma, en cambio, propuso un salario básico de 11.400 a 14.000 pesos que sumando adicionales de paritarias llegaría a los 20.000 pesos.
ENTREVISTA: ARIEL WEINMANN / DESGRABACIÓN: CAMILA CATTANEO
