Corriente Federal de Trabajadores
El ex presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva fue condenado por la corrompida justicia brasileña. Una de sus últimas esperanzas se desvaneció este miércoles, cuando la magistrada Rosa Weber votó a favor de su encarcelamiento. Negaron su habeas corpus los ministros Edson Fachin, Alexandre de Moraes, Luís Roberto Barroso, Rosa Weber y Cármen Lúcia.
El juicio en el Supremo Tribunal Federal (STF) del país vecino analizó si el ex mandatario quedaba en prisión para cumplir una condena de 12 años por presunta corrupción, Tras 11 horas de debate, se formó la mayoría de seis votos necesaria para dar luz verde a la prisión del político popular que puso de pie al gigante del Sur.
Lula no va ingresar en la cárcel inmediatamente. El ex mandatario todavía tiene hasta el 10 de abril para presentar un recurso. Sin embargo, varios los expertos en derecho coinciden en que esta etapa es una formalidad y que la probabilidad de que tenga éxito es relativa.
La decisión de la Suprema Corte es un duro golpe para uno de los políticos más populares que haya tenido Brasil. Dirigente histórico del movimiento obrero brasileño, constructor del Partido de los Trabajadores, eliminó durante su gestión el hambre que sacudía zonas profundas de un pueblo castigado.
El reconocimiento social de su acción gubernamental se registra en los sondeos pre electorales: Lula encabeza la intención de voto. Seguramente ese es el dato que impulsó a las fuerzas antidemocráticas brasileñas, respaldadas por el Departamento de Estado norteamericano y empresarios monopólicos paulistas, a golpear sobre sus derechos cívicos.
Los mercados reaccionaron con euforia a la decisión judicial y la Bolsa de São Paulo se disparó. Mientras, el Partido de los Trabajadores (PT) anunció en una nota que Lula sigue siendo su candidato y denunció que su condena es una maniobra “golpista” de los mismos sectores políticos, judiciales y mediáticos que el año pasado impulsaron la destitución de la anterior presidenta, Dilma Rousseff.
Miles del militantes del PT se manifestaron en el centro de São Paulo, la mayor ciudad del país, en un acto en el que compareció el propio Lula para insistir en que no desistirá de su candidatura a la presidencia. La sentencia implica que Lula, a quien todas las encuestas sitúan con una amplia ventaja para las elecciones de octubre, quede declarado inelegible.
El líder del PT puede presentar un recurso para aplazar la ejecución de las penas ante el mismo tribunal que le ha condenado. Se trata de una solicitud de explicación de la sentencia y los tres magistrados ya han anunciado que, tras ese trámite, pedirán que la pena se ejecute de inmediato.
Vale recordar que los jueces avalaron los argumentos del juez Moro para concluir que Lula recibió un apartamento en una playa del litoral de São Paulo como un soborno de la constructora OAS, beneficiaria de contratos de la petrolera pública Petrobras. Parece una broma, pero esa es la acusación.
Se consumó el Golpe mediático/judicial contra el máximo referente popular de Brasil #LulaDaSilva que además encabeza todas las encuestas electorales. Ese pueblo hermano sabe que Lula vale la lucha. #FuerzaLula @DiputadosFPV_pj @UyO_oficial pic.twitter.com/nOqZc3SyDj
— Walter Correa (@waltercorreasoc) 5 de abril de 2018
El Pueblo de Brasil tiene memoria, aún faltan pasos a resolver en la causa, no está todo dicho. Es momento de hablar en la calle y que los jueces entiendan que la venda en los ojos es para la igualdad.. no para la ceguera. Fuerza Lula Da Silva 💪🏾🇧🇷 pic.twitter.com/9LkFX0E2n9
— Vanesa Siley (@Vsiley) 5 de abril de 2018
