En medio de una crisis económica y social que se profundiza, el Gobierno publicó el decreto que habilita el pago de un bono de 5000 pesos en dos partes en forma excepcional, obligatorio, no remunerativo, para los trabajadores del sector privado y habilitó un procedimiento para los despidos sin causa justa que se extenderá hasta el próximo 31 de marzo. Con estas medidas la CGT desactivará el paro de 36 horas que se contemplaba para fines de noviembre. Fuerte críticas de los sectores más combativos del sindicalismo que tildan a la medida apenas como «un paliativo».
El pago del bono, en el mejor de los casos, será en dos tramos – noviembre y enero- aunque contempla la posibilidad de que se extienda en el tiempo en el caso de las empresas que atraviesan situaciones críticas así como renegociar su monto. El bono podrá ser tomado a cuenta de las revisiones salariales previstas en la firma de acuerdos paritarios.
Quedan excluidos de los alcances del presente decreto los trabajadores del sector público nacional, provincial y municipal. Los estatales nacional acordaron, paralelamente, el pago de un bono en una negociación particular en un sector que ha sufrido una fuerte pérdida del poder adquisitivo del salario.
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