Corriente Federal de Trabajadores
El dirigente gráfico y de la Corriente Federal de Trabajadores, Héctor Amichetti, realizó un balance del año y planteó los desafíos del mundo sindical y político para el período entrante.
Los cambios de año son momentos propicios para realizar balances y explorar las perspectivas para el futuro próximo. El secretario General de la Federación Gráfica Bonaerense y referente de la Corriente Federal de Trabajadores, Héctor Amichetti, en diálogo con Radio Gráfica, realizó un análisis de lo ocurrido en 2021 y los desafíos para el período entrante.
El impacto de la pandemia en el empleo; la reactivación registrada en los últimos meses; el accionar de los formadores de precios en la inflación; las negociaciones con el Fondo Monetario Internacional; la unidad en CGT y la necesidad de consolidar un frente nacional donde converjan los actores del mundo gremial, empresarial pyme, cooperativo y social; algunos de los temas que desarrolló en la entrevista.
Entrevista por Gabriel Fernández
EL BALANCE DEL 2021: «Fue un año complejo porque no pudimos terminar de salir de los condicionantes que impone la pandemia. En los primeros meses del año continuaron algunas limitaciones que condicionaron una reactivación más rápida de la economía y la mejora de la situación social. A partir de los últimos meses empezamos a notar una actividad más normalizada, una reactivación productiva. Eso es alentador».
LOS OBSTÁCULOS. FORMADORES DE PRECIOS E INGRESOS DE LOS TRABAJADORES: “Por otro lado vemos que los obstáculos para la mejora real de los trabajadores y del pueblo en general sigue siendo la acción de determinados grupos económicos con mucho poder, una situación que no hemos podido modificar. Indudablemente han tenido mucha influencia en la formación de precios, batalla que todavía no hemos terminado de resolver. Veremos al final de los acuerdos paritarios si podemos ganarle en algunos puntos a la inflación. Es un problema real que en cuanto no lo podamos dominar afecta la reactivación económica. Los sectores que hemos discutido paritarias, si lo miramos año contra año, hemos recuperado algunos puntos en el poder adquisitivo del salario, pero después tenemos una franja muy importante que no están bajo convenio que siguen perdiendo”.
LOS TEMAS DE FONDO: «Mirando hacia el futuro, las elecciones fueron una señal de alerta muy importante donde el pueblo expresó la real situación que atraviesa, no alcanza con describir el país que recibimos. En la negociación de la deuda el futuro es incierto porque esa idea de que podíamos avanzar con el Fondo con cierta contemplación del propio FMI y de las responsabilidades que podían tener, en realidad lo que se vio hasta ahora es que no hemos podido rehuir a los condicionamientos que siempre impone. Tenemos expectativa que esto que ha manifestado el Presidente en más de una oportunidad de que no se va a aceptar ningún condicionamiento ni ajuste que pueda frenar el desarrollo productivo y social no va existir, pero es cierto que hay incertidumbre. Creo que es importante saber en la discusión del Plan Plurianual donde vamos a poner el acento en la política económica y social. Nuestra posición es que es prioritario reactivar el mercado interno».
LA NECESIDAD DE CONSOLIDAR UN FRENTE NACIONAL: “Cuando a lo largo de su historia el movimiento obrero ha tenido planteos programáticos o puntos de acuerdo en cómo construir poder político, la acertada elección de alianzas para la reconstrucción de un frente nacional resulta imprescindible. Un paso es ganar la elección, pero el gran desafío es el escalón superior que es unir a las fuerzas nacionales que dependen del desarrollo económico y social del país. En 2019 ganamos una elección, pero en realidad estamos muy condicionados por los factores de poder que son los formadores de precios, las grandes empresas exportadoras y el sistema financiero con una banca extranjerizada y enfocada en el negocio financiero. El gobierno tiene que dialogar con todos, pero es importante que fortalezca la construcción política con los sectores que realmente tienen un compromiso de intereses para que Argentina avance hacia un desarrollo económico y social pleno. Son las pymes, el movimiento obrero organizado, las grandes mayorías nacionales, hay que unir a esos sectores y quien debe jugar ese rol es el Gobierno con las políticas de Estado. Todavía eso no se nota con la contundencia con que uno quisiera».
PERSECUSIÓN, LA GESTAPO ANTISINDICAL: «Detrás de esas presiones hay una necesidad concreta del proyecto neoliberal y de las corporaciones de sacarse de encima el obstáculo principal que es el movimiento obrero organizado. Que Cambiemos haya llegado democráticamente al Gobierno no implica que piensen distinto a lo que pensaban desde ese sector económico durante la dictadura. Tienen una obsesión muy grande porque no pueden terminar de cerrar el círculo represivo. Al ganar la elección los que toman el poder son los grupos corporativos que han logrado hacer un entramado más poderoso con los grandes medios de comunicación y la Justicia. Desde ese punto son profundamente antidemocráticos, es imposible tener una democracia genuina con esas políticas neoliberales. En Argentina tienen un problema muy especial a partir de la experiencia histórica del peronismo. Siempre hubo sectores en la calle desde el primer momento resistiendo las políticas del macrismo con la Corriente Federal y CTA, con el Frente Sindical, donde no pudieron imponer la reforma laboral y avanzar con las reformas estructurales que pretendían».
LA UNIDAD EN CGT: Me parece importante la unidad porque han participado todas las líneas internas con los matices que tiene cada sector. Está la claridad de que hay que actuar unido frente a un enemigo que tiene toda la intención de boicotear al gobierno del Frente de Todos. La deuda es que no existe en esa unidad claridad con acuerdos mínimos básicos para ver por donde el movimiento obrero aporta a la reconstrucción del frente nacional. Ahora todo el mundo tiene claro que hay que poner una barrera a la acción de estos grupos corporativos que a su vez cuenta con una Justicia que está siempre dispuesta a acompañarlos».
“También es fundamental rescatar en esa unidad a muchos sectores que orgánicamente pareciera que no tienen tanto peso, pero que están haciendo construcciones muy interesantes. Me refiero a regionales de CGT que en estos días han sacado una declaración importantes, muchas de ellas en conjunto por este tema de las palabras del ex ministro de Trabajo Villegas. Eso enriquece a la unidad, tiene planteos más profundas, busca una participación más democrática en la CGT. La coordinación de regionales de CGT o de espacios más amplios como Producción y Trabajo también es importante. Ellos saben que el obstáculo para volver es que tengamos la capacidad de preservar la unidad, del Frente de Todos y de las organizaciones del pueblo. Sobre la división de los sectores populares es la única posibilidad de avanzar o de retrotraernos a los cuatro años del macrismo”.
