Corriente Federal de Trabajadores
Un grupo de organizaciones que nuclean pequeñas y medianas empresas se movilizaron días atrás al Congreso con la consigna “ni una pyme menos” advirtiendo por la situación terminal que vive el sector. Allí denunciaron que están bajando sus persianas 25 pymes por día al no poder afrontar el pronunciado deterioro económico. Según datos del Centro de Economía Política Argentina (CEPA) desde diciembre de 2015 ya han cerrado sus puertas más de 9600 pymes en una situación que pone en jaque miles de trabajos ya que ese sector representa, aproximadamente, el 70% del empleo privado registrado.
Para hablar sobre ese tema, entrevistamos a Juan Ciolli, vicepresidente de la Central de Entidades Empresarias Nacionales (CEEN). Días atrás fue uno de los dirigentes empresarios que fue parte de la reunión con la Corriente Federal de Trabajadores en la sede de APLA y que impulsó la actividad de las pymes el jueves pasado en el Congreso de la Nación. Allí entregaron un documento reclamando una serie de medidas urgentes para paliar la crítica situación que atraviesa el sector pyme.
Por LEONARDO MARTÍN
Días atrás se manifestaron a las puertas del Congreso con expresiones muy duras sobre el modelo económico del macrismo, ¿cuál es la situación de las PYMES hoy en Argentina?
El otro día nos movilizamos al Congreso por la situación crítica que estamos atravesando las pymes. Eso nos hizo autoconvocarnos para reclamar a los diputados nacionales un serie de paliativos para evitar que se sigan cayendo pymes y destruyendo puestos de trabajo. A lo diputados nacionales les expusimos la situación por la que estamos pasando las pymes. Primera cuestión, un mercado interno absolutamente deteriorado vinculado a la pérdida de poder adquisitivo del salario tanto de los trabajadores activos como pasivos. Un segundo elemento el aumento descabellado de las tarifas y los servicios públicos. A las pymes nos afecta desde dos lados, en primer lugar porque afecta nuestros costos de producción. En segundo lugar, a la pérdida de poder adquisitivo se le agrega esta locura de tarifas superando el 1500% restándole a la gente capacidad de consumo. Muchas personas tiene que pensar en comer y pagar tarifas y ya no le queda margen para consumir ningún otro producto. El tercer elemento es la apertura indiscriminada de la economía en un momento donde el mundo está en una guerra comercial. Las economías se van cerrando y, por el contrario, la nuestra se abre. Un cuarto elemento es la falta de financiamiento sin lo cual no tenemos posibilidad de generar capital de trabajo. Todo esto genera un combo que provoca que alrededor de 25 pymes por día estén cayendo. Por ello tomamos la decisión de decir que se pongan, al menos, algunos paliativos para evitar que estas cuestiones sigan ocurriendo, se siga incrementando la destrucción de la industria y, por supuesto, se sigan perdiendo puestos de trabajo y generando pobreza.
¿Qué recepción tuvieron en el Congreso por parte de los diputados?
Hubo una movilización pyme que ni nosotros dirigentes pymes imaginamos, esto llevó a que un grupo de 25 diputados bajaran del recinto, nos habilitaran un salón en el edificio anexo y vinieran a escuchar nuestros reclamos. Lamentablemente no estuvo el oficialismo, pero sí todos los bloques de la oposición. Nosotros planteamos los reclamos para detener esta destrucción de pymes. Somos conscientes de que si no hay un cambio de políticas macroeconómicas no habrá una solución definitiva. De todos modos necesitamos que algo se haga para evitar esta sangría permanente. Necesitamos que vean la realidad. Las pymes somos un sujeto social muy importante. Somos actores fundamentales en la generación de trabajo y, también, actores importantes en lo que denomino una democratización de la economía nacional. No pueden hacer oídos sordos a lo que esto genera.
¿Qué opina de la gestión del ministro de Producción Dante Sica que al menos en su discurso tiene alguna referencia a las pymes?
No hay absolutamente ninguna política concreta. Dante Sica responde a las políticas que bajan desde Presidencia de la Nación. Todo aquello que se pueda charlar con Sica no se traduce en ninguna mejora concreta para resolver los problemas que hoy tenemos.
La semana pasada se produjo algo muy interesante en donde tanto su organización como otras estuvieron reunidos con la Corriente Federal de Trabajadores. Hubo allí una coincidencia en la visión desde el sector trabajador con el sector pyme. ¿Cuál es su interpretación de esa reunión y el trabajo futuro que se puede desarrollar?
Es fundamental esa unidad. Las pymes y los trabajadores tenemos un destino común. Ni los trabajadores ni las pymes podemos volver a confundirnos como ocurrió en muchas épocas de nuestra historia donde los trabajadores nos veían como los patrones perversos y nosotros veíamos a los trabajadores como nuestros enemigos. Ese tipo de cuestiones tiene que quedar desterrada, por eso estamos trabajando intensamente para cambiar esa lógica y entender que si los trabajadores, las cooperativas y las pymes no tenemos un objetivo común va a ser muy difícil que podamos superar este momento.
Este camino lo empezamos a transitar en el año 2012 con el Núcleo del MTA (Movimiento de Trabajadores Argentinos). Por suerte, hoy se profundizó porque estamos trabajando con la Corriente Federal. Esto es muy importante, tenemos muchas expectativas de lograr una fuerte alianza estratégica entre la producción y el trabajo. Si eso lo logramos va a ser en beneficio de la sociedad argentina, no podemos seguir divididos trabajadores y empresarios pymes. Si eso no ocurre va a ser en beneficio de los capitales concentrados que van a manejar a su buen gusto la economía del país.
¿Cuál es la expectativa que tienen para 2019?
Es negativa. Puede ser que haya una pequeña reactivación como la hubo en 2017 después de la caída en 2016. Ahora no cabe duda que si uno analiza el presupuesto nacional para 2019 y de la Provincia son presupuestos de tremendos ajustes. Va a haber dinero para los sectores más humildes para evitar explosiones sociales que impacten en el resultado electoral, pero el problema sigue existiendo. No hay proyecto industrial, se atacó al INTI, al Conicet, se bajó al Ministerio de Trabajo y al de Ciencia y Tecnología y se lo llevaron a Secretaría lo que son señales hacia dónde va la política.
El macrismo y sectores empresariales han planteado la necesidad de una reforma laboral. ¿Cuál es su opinión sobre ese tema?
La reforma laboral que vienen planteando en realidad es una flexibilización laboral. Si hay que hacer una reforma laboral deberíamos participar los trabajadores y las pymes en la elaboración de esa reforma. No se puede hacer de cualquier manera y graciosamente. Tratemos de adaptar leyes a la actualidad, por ejemplo, pensar cuál es el futuro del trabajo en un mundo que hoy está regido por la robotización, por la inteligencia artificial la digitalización. Pensémoslo en base a eso, pero no para flexibilizar trabajo y destruir salario. Ese es el peor escenario para las pymes porque las pymes dependemos de ese mercado interno y el mercado interno es salario, sin salario no hay mercado interno.
