Corriente Federal de Trabajadores
La suba de 3 puntos en las retenciones a la soja para los grandes productores disparó el lock out patronal de la Mesa de Enlace que busca reeditar el clima de rechazo al gobierno de las protestas de 2008, hasta ahora sin éxito. En diálogo con Sindical Federal, el secretario general de la Asociación de Trabajadores Rurales y Estibadores de Salta (ATRES), Ernesto Ojeda, analizó la medida y la disputa que se abrió con sectores del agronegocio.
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«Ya lo comprobamos con la resolución 125. El dato más importante en el tiempo es que ese triunfo relativo que tuvieron, dos años después Cristina los superó con el 54% de los votos hasta en la Pampa sojera. Pero confunden, mienten, pero también tienen herramientas de convocatoria», remarcó Ojeda. «La historia no se repite de la misma manera. Hoy el pueblo argentino, las organizaciones sociales, políticas, sindicales, hasta UATRE que fue su aliado durante años toma distancia«, agregó.
El Gobierno avanzó con la suba de retenciones para la soja como parte de la batería de herramientas otorgadas en la ley de Solidaridad Social y Reactivación Productiva sancionada en diciembre pasado. Ojeda interpreta que la reacción de los sectores del agro. «Se ponen furiosos cada vez que aparece un gobierno popular que se compromete con un programa de redistribución. No quieren que los trabajadores, los marginados se acerquen a niveles de consumo. No quieren que el peronismo tenga fuerza. Si el peronismo distribuye, es peronismo, es inclusivo y tiene políticas de estado«, sentenció.
«Ellos aprendieron que hay que impedir que el gobierno ejecute su compromiso, por eso lo quieren desfinanciar. Nosotros aprendimos la lección de que a veces defendiendo un proyecto, provocamos. Hoy estamos discutiendo de otra manera, supimos entender la conformación del frente«, agregó.
UN LOCK OUT SIN FUERZA
El dato político significativo de esta medida que ha tomado la Mesa de Enlace es el fracaso al momento de paralizar la comercialización. Pese a que inicialmente la Federación Agraria, que nuclea a los productores más pequeños, se había plegado a la medida a partir de las protestas de sus bases desde la conducción se terminó dando «libertad de acción a sus bases». A diferencia del 2008 la retenciones el proyecto incluye retenciones segmentadas y beneficios para economías regionales que dividieron lo que en 2008 fue un frente común.
«Todos tienen los números, todo indica que el problema no son esos 3 puntos. Lo de estos días es una vergüenza. Como se dieron cuenta que el pueblo no se comía el amague, dijeron que esto era contra el FMI. Eso da la pauta de que el pueblo no se confunde de nuevo«, expresó Ojeda.
El referente de ATRES aprovechó para indicar un déficit o autocrítica sobre la etapa anterior: el Fondo Sojero fue un recurso obtenido en plena discusión de la 125 en el año 2008 que, si bien no era el objetivo central, fue una conquista importante. Durante la gestión de Mauricio Macri ese fondo fue dado de baja sin demasiada resistencia. «Ningún sojero quebró en la Argentina porque durante años se distribuyó el excedente extraordinario de la exportación de soja al mundo y con esa política. Hasta los municipios más pequeños del interior recibían un monto legal en concepto de coparticipación. Cuando Macri lo sacó (septiembre 2018), el pueblo no peleó. Gracias a ese fondo no quebró un solo productor, y cuando lo perdimos no supimos defenderlo, no tomamos conciencia«, señaló el salteño.
Tiempo atrás el empresario con un gran desarrollo en la producción sojera, Gustavo Grobocopatel había señalado que «Con Macri pagamos más impuestos que con Cristina, pero contentos». Para Ojeda, «No sólo hay memoria, hay comprensión. La dictadura militar quería cambiar la estructura productiva y distributiva y la base de la cultura del pueblo argentino: el peronismo expresado en los trabajadores. La desindustrialización nos obligó a hacer contraprestaciones en un modelo de excluídos. Grobocopatel como Videla tienen claro que prefieren pagar más a un modelo conservador que acompañar a un modelo de desarrollo porque es un pueblo que se hace parte del crecimiento de la Patria«.
LA MESA CONTRA EL HAMBRE
Los trabajadores rurales participan en la convocada Mesa Contra el Hambre, iniciativa clave en el primer tramo del gobierno de Alberto Fernández. «Allí participamos algunos como somos nosotros, pero también hay otros que tienen la idea de que no haya Estado. Hay que hacer el intento y creer en la fuerza del campo popular. Hay que participar teniendo en cuenta que ese no es el ámbito que va a garantizar la distribución«, señaló el dirigente.
Así como se ponderó la orientación de recursos a causas de emergencia, también criticó la ausencia de las reivindicaciones de los trabajadores rurales en la agenda gubernamental conocida hasta el momento: «También hay que decir que no están en la agenda del gobierno los trabajadores agrarios. Que estén los pequeños productores nos alegra enormemente, somos compañeros. Lo que digo es que nosotros tenemos tremendas necesidades, que tenemos un sindicato que tiene siempre un sindicato que negocia a la baja, hay cuestiones muy importantes a resolver«.
Finalmente, el hombre de la Corriente Federal también se refirió a la situación coyuntural del movimiento obrero y la situación interna dentro de la CGT. «Es imprescindible que la conducción del movimiento obrero tome la iniciativa en la voz y en la acción. Hay una dirigencia que es muy cauta ante la situación general. El problema no es la cautela, pero tenemos que tener voz y acción protagónica en el momento difícil para atacar los problemas acuciantes, establecer prioridades y marcárselas al gobierno».
Para finalizar, mencionó a la UATRE, principal pata gremial de Cambiemos, hoy devenida en una organización cercana al actual gobierno. «Me duele mucho que el dato sea que UATRE apoye al gobierno pero no se reivindique al sector de los trabajadores rurales como los más perjudicados del proceso anterior y del presente también. Son las regionales, los delegados, los referentes sindicales honestos y patriotas que tenemos en la Corriente Federal y en tantos lugares los que tienen que tomar la bandera«, apuntó.
