Corriente Federal de Trabajadores
La Federación Gráfica Bonaerense se movilizó a Plaza de Mayo en respuesta al cierre de AGR-Clarín, con 380 despidos. Se reclamó por la reapertura de la empresa como primer reclamo, pero sobre todo se apuntó a las políticas destructoras de la producción nacional del macrismo.
Por LEONARDO MARTÍN
La Federación Gráfica Bonaerense (FGB) junto a la Comisión Interna de AGR-Clarín, con el acompañamiento de gremios que integran la Corriente Federal de Trabajadores, de la CTA, organizaciones políticas, sociales y agrupaciones de izquierda marcharon desde el edificio de la FGB ubicado en Paseo Colón e Independencia hasta la Plaza de Mayo. El motivo fue el repudio por los 380 trabajadores despedidos en AGR reclamando la reapertura de la empresa con la conservación de los puestos de trabajo. Eso como eje más visible, pero con el reclamo de fondo contra la política desindustrializadora que lleva adelante el macrismo, palpitando lo que seguramente será una gran movilización de trabajadores el próximo 7 de marzo.
En un jornada agobiante, con un sol impiadoso sobre el asfalto porteño y una humedad que hacía transpirar los huesos, la convocatoria fue importante. Las columnas se desplegaron sobre Paseo Colón para después tomar por la Avenida Belgrano y terminar desembocando en Plaza de Mayo donde se hizo el acto central. También se preparó un petitorio realizado por la FGB que fue entregado en Casa de Gobierno (Ver Aparte).
En la Plaza se desarrollaba una radio abierta, sostenida por Radio Gráfica, donde cerró el acto el “Gringo” Héctor Amichetti, secretario general de la FGB. Previamente habían hablado Walter Correa (curtidores), Fabián Felman (CEA), Héber Ríos (Atilra), Luis Graña (bancarios) “Beto” Pianelli (Metrodelegados) y “Tano” Catalano (ATE-Capital).
La protesta tenía como referencia cercana el Plenario de Delegados de gremios industriales desarrollado por la mañana en la CGT con presencia del triunviro conductor. Allí se habló sobre la movilización del próximo 7 de marzo y sobre el rol de la Central de Trabajadores de cara a las políticas del macrismo. Con algo de esa efervescencia la columna con gremios de la Corriente Federal de Trabajadores ingresó a la histórica plaza cantando “Me parece que Macri no quiere escuchar, me parece que Macri no quiere escuchar, viene el paro, viene el paro general”.
En su discurso Héctor Amichetti habló sobre la situación en AGR, pero también sobre ese tema.“Cada una de las luchas que estamos dando individualmente tienen un solo fin. Cambiar estas políticas de injusticia, enfrentar firmemente, con los trabajadores en las calles, a un proyecto que es enemigo del pueblo en general” arremetió al comienzo.
Continuó: “Hoy estamos acá por un conflicto puntual, pero no es un conflicto aislado. El desprecio que este Gobierno está mostrando por el trabajo no se vio nunca antes en la historia” afirmó con vehemencia.
“Funcionarios que con total desprecio digan que tomar y despedir trabajadores es como comer y descomer. Cuando tuvimos más de 300 despidos en Clarín que haya un presidente que diga que ‘esto es lo más natural, que haya empresas que abren y otras que cierren’ Que un Gobierno diga que las conquistas del movimiento obrero son antiguas para el siglo XXI” describió.
“Nos está diciendo que es antigua la justicia social, que es antiguo que querramos la independencia económica. Eso nos demuestra que no hay posibilidad de conseguir absolutamente nada con un proyecto que es el mismo de otros tiempos, de dictaduras, que nos costó la sangre de muchos compañeros” exclamó el referente gráfico.
La unidad del movimiento obrero, gran tema de esta época, una necesidad para confrontar con la suficiente fortaleza políticas que impactan de lleno, negativamente, en la vida de los trabajadores. Haciendo un balance global se pueden ver avances, pero la urgencia por enfrentar a las políticas del macrismo hace necesaria mayor velocidad en ese proceso y esa confluencia en la acción.
Amichetti se refirió al respecto: “Lo dijimos a la mañana en la CGT, hemos trabajado para la unidad. Si algo entendemos es que tenemos que enfrentar a este proyecto con unidad” refiriéndose al plenario desarrollado por la mañana.
“Trabajemos por la unidad, tengamos grandeza, no como la mezquindad de muchos que piensan que la unidad solo se hace con paciencia. Lo que enfrentamos es un proyecto de destrucción y si no lo enfrentamos con unidad es imposible que lo derrotemos” exclamó deslizando críticas por la estrategia tomada desde la conducción obrera.
“El gran compromiso de los dirigentes del movimiento obrero es unir esas luchas, por eso fuimos con los delegados de base a la CGT y hemos planteado que vamos a apoyar con toda la fuerza el plan de acción, que tenemos que reventar las calles con la movilización el 7 de marzo. Hemos hablado con las PyMES y están más combativas que los propios dirigentes del movimiento obrero” describió el “Gringo”.
“No podemos quedarnos con la movilización del 7 de marzo. Es el primer paso para la continuidad de un plan de lucha que desemboque en un paro nacional” afirmó.
Finalizó: “Defendemos los puestos de trabajo, pero más importante es que defendemos un proyecto nacional que es necesario en el movimiento obrero. Esta batalla es sindical, pero sobre todo es política. La clase trabajadora debe construir un gran movimiento, levantando un proyecto. Tenemos que estar preparados para gobernar la Argentina”.
En declaraciones posterior a Sindical Federal Walter Correa, secretario general del Sindicato de Obreros Curtidores, expresó: “La Corriente en el último año ha luchado y acompañado todos los conflictos. Hoy le toca a los gráficos pero mañana a los curtidores o metalúrgicos. Lo concreto es que estamos de pie, no nos entregamos y seguimos luchando”.
Héber Ríos, secretario general de Atilra-General Rodríguez y referente de la juventud de la Corriente por su lado afirmó: “La Corriente Federal de Trabajadores es el espacio donde tenemos que estar. Las políticas económicas que lleva adelante este Gobierno atenta contra la clase trabajadora. Pelear en las calles es la única manera de revertir las políticas de este Gobierno. La lucha es la única manera de revertir esa situación”.
Como decíamos líneas arriba, la convocatoria fue por AGR pero con el foco puesto en las políticas del macrismo que van a multiplicar este tipo de situaciones en tiempos venideros. La Corriente Federal de Trabajadores desde agosto pasado, pero también desde sus organizaciones previas, han mantenido un discurso y un diagnóstico que va madurando en otros sectores sindicales y políticos. No queda otra que confrontar ante un proyecto que viene por el empleo, por los derechos laborales y a realizar una gigante transferencia de riqueza a sectores concentrados de la economía a costa del empobrecimiento del pueblo.
Hoy fue AGR, mañana será otra de las tantas empresas que cierra o trabajadores despedidos en el Estado. La pregunta que resuena cada vez más fuerte en la militancia política y sindical es: ¿Será marzo, con sus numerosas y previsiblemente masivas manifestaciones y conflictividad, el mes bisagra en la relación del movimiento obrero en su conjunto con el Gobierno? En semanas comenzaremos a responder esa pregunta.
PETITORIO PRESENTADO POR LA FEDERACIÓN GRÁFICA BONAERENSE
